Nadie tenía dudas de lo que iba a suceder en el Estadio Vicente Calderón, en la noche del viernes, justo en el momento en que sonaran los acordes del himno monárquico español con la presencia del aspirante Borbón al trono. La pitada de los seguidores del F.C. Barcelona y del Athletic Club de Bilbao estaba anunciada y la presidenta ultraderechista de Madrid, Esperanza Aguirre, se había encargado también de calentar el ambiente, manifestando que ante un acto de protesta como éste "se debería suspender al partido para celebrarlo luego a puerta cerrada".
Pero si nadie dudaba de cuál iba a ser la respuesta popular en el madrileño estadio de futbol ante los símbolos y representantes de la monarquía, sí se mantenía la incógnita sobre el tratamiento que se daría a la misma en Televisión Española. Ya en 2009 la cadena de televisión controlada por los partidos del establishment había cortado la señal justo en el momento en el que las aficiones regalaban otra grandiosa pitada a Juan Carlos de Borbón. Posteriormente, los responsables del Ente Público se vieron obligados a pedir perdón, esgrimiendo la insostenible excusa de que la oportuna desconexión se había debido a un mero "error humano".
El escándalo que provocó la operación de RTVE, sin embargo, no impidió que este sábado la cadena pública volviese a censurar la realidad, contribuyendo definitivamente a terminar con el mito de la "libertad de expresión" que supuestamente existe en los medios de comunicación españoles. En uno de los episodios más bochornosos que se recuerdan, TVE elevó el volumen del himno y bajó el sonido ambiente, para que los telespectadores no percibieran el alcance de la monumental pitada que se produjo. Paradójicamente, el mismo locutor de Televisión Española se veía obligado a reconocer que ”el público en su mayoría no ha guardado silencio, las notas del himno en el estadio prácticamente han sido inaudibles". Inmediatamente después el mismo locutor, previsiblemente confundido por las instrucciones recibidas de sus superiores sobre lo que había que decir, se contradecía a sí mismo al afirmar que "había dos opciones: o respetar el himno o no hacerlo y la mayoría de los espectadores ha optado por la primera".
LAS REDES SOCIALES HIERVEN DE INDIGNACIÓN CONTRA LA CENSURA EN EL ENTE PÚBLICO
De manera prácticamente inmediata, las redes sociales comenzaron a hervir con los denuncias de una multitud de ciudadanos. Los usuarios de Twitter mostraron de forma masiva su indignación por la censura. "Una vergüenza que TVE baje el sonido ambiente y ponga el himno por otro canal...", escribía un tuitero. "TVE manipula el sonido ambiente para camuflar la espectacular pitada. Necesitamos una tv que no mienta", sostenía otro. Idéntico cariz tuvieron la mayoría de los comentarios registrados.
Fuentes de TVE, por su parte, aseguraron que nunca tuvieron "ninguna voluntad" de que el volumen de los pitidos se emitiera bajo y se limitaron a retransmitir el sonido facilitado por la organización. Ofrecemos a nuestros lectores el vídeo de TVE seguido de otro con el audio original, para que puedan juzgar por sí mismos sobre la plausibilidad de la justificación oficial sobre lo sucedido en los prolegómenos de la final de fútbol.
Fuente: Canarias Semanal
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